Actuarán:
- Mala Reputación
- Kilómetro 19
- RH
- Mitos
- Y otros
Las puertas se abrirán a las 21:30hs. Las entradas están a la venta en Kisoco "Junior", en calle Ingeniero Boasi, entre Belgrano y Saavedra.
Saludos, Bledo.
12/2/10
Festival de Rock en Laguna Paiva
El día 27 de Febrero se realizará en la ciudad de Laguna Paiva un festival de rock, más precisamente en la Sociedad Italiana, (cita en calle: al lado de Utopía) las entradas anticiapadas tienen un valor de $5, (a falta del rengo nos conformamos con eso).
Actuarán:
- Mala Reputación
- Kilómetro 19
- RH
- Mitos
- Y otros
Las puertas se abrirán a las 21:30hs. Las entradas están a la venta en Kisoco "Junior", en calle Ingeniero Boasi, entre Belgrano y Saavedra.
Saludos, Bledo.
Actuarán:
- Mala Reputación
- Kilómetro 19
- RH
- Mitos
- Y otros
Las puertas se abrirán a las 21:30hs. Las entradas están a la venta en Kisoco "Junior", en calle Ingeniero Boasi, entre Belgrano y Saavedra.
Saludos, Bledo.
3/2/10
Ven a volar conmigo
Buenas gente de la Internet, el día de hoy analizaremos el fallo, acontecido el día de ayer, sobre el accidente del vuelo 3142 de LAPA. Me gustaría decir que la palabra “fallo” se adecua perfectamente a este hecho en particular.
Se leía en el diario Crítica hoy, 03/02/'10:
"AQUÍ NO PASÓ NADA
Caso LAPA: la Justicia absolvió a las máximas autoridades de la línea aérea
Tras 23 meses de juicio, el fallo fue favorable para los máximos directivos de la empresa y dos ex miembros de la Fuerza Aérea. Sólo dos funcionarios intermedios de la compañía recibieron penas. Indignación de los sobrevivientes."
Parece ilógico, y hasta lo es. Le echan la culpa a dos personas (y hasta por ahí), cuando en realidad se veía claramente que esto no fue un accidente “normal”. A lo mejor el público en general no entendía realmente las causas del siniestro, y hoy, en la linda tele que tenemos, los únicos que hablaron cabalmente acerca de este fallo en los pocos minutos que se le dedicaron a la noticia (parece que es más importante decir que estamos en alerta topacio por el estado del tiempo, linda cosa para copiarle al gobierno de Bush), eran, los abogados de las familias de las víctimas, las familias de las víctimas, y Enrique Piñeyro, quién, como veremos más adelante, tubo un papel importante en este revuelo. No hubo “especialistas” en TN hablando del tráfico de droga en los aviones, ni vimos en 6, 7, 8 al staff haciendo comentarios de que eso en la aerolínea del Estado no pasa. No.
Es momento de poner las cartas en la mesa y analizar que es exactamente lo que pasó el 31 de Agosto de 1999 en el Aeroparque Jorge Newbery (SABE) con el Boeing 737-200 matrícula LV-WRZ de la empresa LAPA.
Sigamos. Cuando los pilotos intentaron elevar el morro del avión para despegar, estaban muy por debajo de la velocidad mínima de despegue sin Flaps (razón por la cual se deben desplegar los Flaps para despegar, de lo contrario se necesitaría de una pista demasiado larga), pero a su vez iban demasiado rápido para poder detener el avión. Por esta razón continuaron intentando, en vano, levantar vuelo. El avión cruzó la cabecera de la pista, a través del predio de Aeroparque y de la avenida Rafael Obligado, estrellándose en un terraplén de la Asociación Argentina de Golf.
Aquí terminan los hechos puntuales, pero nacen algunos interrogantes:
¿Por qué los pilotos no configuraron correctamente los Flaps, y desoyeron las alarmas?
Los pilotos de cualquier aerolínea, antes del vuelo, recorren paso por paso una lista o checklist de acciones que aseguran que el avión se encuentre en condiciones óptimas para el despegue. Los pilotos del vuelo 3142 pasaron por alto algunos de los items de esta lista. ¿Pero por qué?. Enrique Piñeyro, ex piloto de LAPA y ex comandante del Boeing 737-200 LV-WRZ, había denunciado en ocasiones anteriores graves irregularidades en los procedimientos de la empresa, tanto que se vió obligado a renunciar dos meses antes del accidente luego de ver que sus constantes reportes eran ignorados. Una de las denuncias que hizo, decía que la empresa no cumplía como debía con el entrenamiento y examen constante de los pilotos, haciendo que sean examinados una vez cada dos años en lugar de dos veces por año como indican las regulaciones. Éstas regulaciones caen bajo el ala de la Fuerza Aérea Argentina, que en ese momento controlaba el tráfico aéreo en el país (suceso único en el mundo, algo así como decir que los trenes no servían), por lo que también se registraba un incumplimiento por parte de las autoridades nacionales. Por esta serie de irregularidades, los pilotos en el día del accidente no controlaron la configuración de los Flaps, no por negligencia propia, sino por falta de entrenamiento en los procedimientos. Razón por la cual también desoyeron la alarma del nivel de los Flaps, que además había estado dando falsas alarmas por espacio de un mes antes del accidente, por falta de mantenimiento.
Por lo que queda claro que la cadena de responsabilidades sobrepasa a los directivos de LAPA y llega hasta la cúpula de la Fuerza Aérea, haciendo que el fallo del día de ayer sea una vergüenza más con la que tendremos que cargar, y deja en claro que desde el momento del accidente hasta hoy poco se ha aprendido. Pero con el control del tráfico aéreo fuera de las manos de la Fuerza Aérea desde hace tiempo, vale decir que un accidente con estas características es poco probable que suceda otra vez.
Si quieren saber algo más acerca del tema pueden ver “Fuerza Aérea S.A” y “Whisky, Romeo, Zulu” del director Enrique Piñeyro.
Esto fue todo por hoy, saludos, Bledo.
Se leía en el diario Crítica hoy, 03/02/'10:
"AQUÍ NO PASÓ NADA
Caso LAPA: la Justicia absolvió a las máximas autoridades de la línea aérea
Tras 23 meses de juicio, el fallo fue favorable para los máximos directivos de la empresa y dos ex miembros de la Fuerza Aérea. Sólo dos funcionarios intermedios de la compañía recibieron penas. Indignación de los sobrevivientes."
Boeing 737-200 matrícula LV-WRZ antes de ser vendido a LAPA
Parece ilógico, y hasta lo es. Le echan la culpa a dos personas (y hasta por ahí), cuando en realidad se veía claramente que esto no fue un accidente “normal”. A lo mejor el público en general no entendía realmente las causas del siniestro, y hoy, en la linda tele que tenemos, los únicos que hablaron cabalmente acerca de este fallo en los pocos minutos que se le dedicaron a la noticia (parece que es más importante decir que estamos en alerta topacio por el estado del tiempo, linda cosa para copiarle al gobierno de Bush), eran, los abogados de las familias de las víctimas, las familias de las víctimas, y Enrique Piñeyro, quién, como veremos más adelante, tubo un papel importante en este revuelo. No hubo “especialistas” en TN hablando del tráfico de droga en los aviones, ni vimos en 6, 7, 8 al staff haciendo comentarios de que eso en la aerolínea del Estado no pasa. No.
Es momento de poner las cartas en la mesa y analizar que es exactamente lo que pasó el 31 de Agosto de 1999 en el Aeroparque Jorge Newbery (SABE) con el Boeing 737-200 matrícula LV-WRZ de la empresa LAPA.
Aeronave accidentada en Aeroparque
A las 20:54 aceleraban los motores del avión con destino a Pajas Blancas en la ciudad de Córdoba. Cuando la aeronave alcanzaba aproximadamente la mitad de la pista 13 de 2100 metros de recorrido, una alarma comenzó a sonar indicando que los Flaps no estaban en configuración de despegue. Hagamos un alto aquí.
¿Qué son los Flaps?: Los Flaps son alerones que se encuentran embutidos en la sección trasera del ala de un avión, y que, cuando son desplegados, aumentan la sustentación de la aeronave, permitiéndole “volar” a velocidades menores. En el aterrizaje se usan para tocar tierra a una velocidad lo suficientemente baja como para no dañar el tren de aterrizaje, y durante el despegue, permiten que la aeronave se despegue de la pista en una distancia más o menos corta.
Detalle de los Flaps
Sigamos. Cuando los pilotos intentaron elevar el morro del avión para despegar, estaban muy por debajo de la velocidad mínima de despegue sin Flaps (razón por la cual se deben desplegar los Flaps para despegar, de lo contrario se necesitaría de una pista demasiado larga), pero a su vez iban demasiado rápido para poder detener el avión. Por esta razón continuaron intentando, en vano, levantar vuelo. El avión cruzó la cabecera de la pista, a través del predio de Aeroparque y de la avenida Rafael Obligado, estrellándose en un terraplén de la Asociación Argentina de Golf.
Aquí terminan los hechos puntuales, pero nacen algunos interrogantes:
¿Por qué los pilotos no configuraron correctamente los Flaps, y desoyeron las alarmas?
Los pilotos de cualquier aerolínea, antes del vuelo, recorren paso por paso una lista o checklist de acciones que aseguran que el avión se encuentre en condiciones óptimas para el despegue. Los pilotos del vuelo 3142 pasaron por alto algunos de los items de esta lista. ¿Pero por qué?. Enrique Piñeyro, ex piloto de LAPA y ex comandante del Boeing 737-200 LV-WRZ, había denunciado en ocasiones anteriores graves irregularidades en los procedimientos de la empresa, tanto que se vió obligado a renunciar dos meses antes del accidente luego de ver que sus constantes reportes eran ignorados. Una de las denuncias que hizo, decía que la empresa no cumplía como debía con el entrenamiento y examen constante de los pilotos, haciendo que sean examinados una vez cada dos años en lugar de dos veces por año como indican las regulaciones. Éstas regulaciones caen bajo el ala de la Fuerza Aérea Argentina, que en ese momento controlaba el tráfico aéreo en el país (suceso único en el mundo, algo así como decir que los trenes no servían), por lo que también se registraba un incumplimiento por parte de las autoridades nacionales. Por esta serie de irregularidades, los pilotos en el día del accidente no controlaron la configuración de los Flaps, no por negligencia propia, sino por falta de entrenamiento en los procedimientos. Razón por la cual también desoyeron la alarma del nivel de los Flaps, que además había estado dando falsas alarmas por espacio de un mes antes del accidente, por falta de mantenimiento.
Indicador de nivel de Flaps
Por lo que queda claro que la cadena de responsabilidades sobrepasa a los directivos de LAPA y llega hasta la cúpula de la Fuerza Aérea, haciendo que el fallo del día de ayer sea una vergüenza más con la que tendremos que cargar, y deja en claro que desde el momento del accidente hasta hoy poco se ha aprendido. Pero con el control del tráfico aéreo fuera de las manos de la Fuerza Aérea desde hace tiempo, vale decir que un accidente con estas características es poco probable que suceda otra vez.
Si quieren saber algo más acerca del tema pueden ver “Fuerza Aérea S.A” y “Whisky, Romeo, Zulu” del director Enrique Piñeyro.
Esto fue todo por hoy, saludos, Bledo.
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